Impuestos saludables, ¿qué son y cómo afectan a mi negocio?

En Colombia, los impuestos saludables se han convertido en una herramienta fundamental para promover la salud pública y combatir el consumo de productos que afectan la salud de los consumidores.

Este impuesto adicional se aplica a productos específicos, para así internalizar los costos asociados a las enfermedades causadas por su consumo excesivo, como la obesidad, las enfermedades cardíacas y la diabetes; y al mismo tiempo incentivar opciones más saludables y contribuir a la sostenibilidad del sistema de salud.

¿Y cuál es su alcance?

En el país, los impuestos saludables se han implementado de manera gradual, primero se estableció un impuesto al consumo del 8% para bebidas azucaradas como gaseosas, jugos y bebidas energéticas.

Luego, se amplió su alcance al incluir alimentos procesados con alto contenido de sodio, azúcar o grasas saturadas. Estos productos ahora están sujetos a un impuesto al consumo del 10%.

Continúa leyendo para aprender más sobre estos impuestos, el objetivo de su implementación y su impacto en la salud pública 🤓🍟🥑🥨

¿Qué son los impuestos saludables y cuáles son sus objetivos?

Los impuestos saludables, también conocidos como  impuestos sobre productos no saludables o impuestos sin azúcar, son cargos extra que se aplican a productos que pueden ser perjudiciales para la salud, como bebidas azucaradas, alimentos procesados y cigarrillos.

Sus objetivos de los impuestos saludables son:

• Disminuir el consumo de productos no saludables al aumentar su precio.
• Generar ingresos para financiar programas de salud pública por medio de los impuestos saludables recaudados, y así promover la alimentación saludable, la educación nutricional y la prevención de enfermedades.
• Reducir los costos de atención médica asociados con enfermedades crónicas como la obesidad, las enfermedades cardíacas y la diabetes.

¿Cómo afectan los impuestos saludables a mi negocio?

Los impuestos saludables afectan a empresas de distintos sectores, no solo a las grandes industrias que producen productos azucarados o procesados, sino también a medianas y pequeñas empresas.

¿Cómo cuáles? Si tienes un restaurante, café o bar; si eres distribuidor o minorista de bebidas azucaradas o alimentos procesados, si tienes un supermercado o minimercado, o si tienes tiendas de productos naturales o una empresa productora de opciones de alimentación saludable. 

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El impacto que puedan tener estos impuestos en tu negocio dependerá de varios factores, aquí te contamos de algunos aspectos a considerar:

1. Aumento del precio de los productos, lo que podría afectar la demanda, especialmente entre los consumidores sensibles al precio.

2. Cambios en las preferencias de los consumidores, que al ser cada vez más conscientes de la salud podrían optar por productos más saludables o reducir su consumo de los productos gravados.

3. Oportunidades para innovar, ofreciendo productos más saludables que no estén sujetos a estos gravámenes.

4. Necesidad de adaptación por parte de las empresas que venden productos gravados con impuestos saludables. Podrían necesitar ajustar sus estrategias de marketing, publicidad y precios para adaptarse al nuevo mercado.

Recomendaciones para tu negocio

• Evalúa el impacto de los impuestos saludables en tu negocio, considerando tus productos, público y competidores.
• Comunica los cambios en los precios de los productos gravados a tus clientes sobre los cambios y explica las razones del aumento.
• Ofrece alternativas más saludables a los productos gravados para satisfacer las necesidades de los consumidores que buscan opciones más saludables.
• Promueve la salud por medio de estrategias de marketing y publicidad.
• Monitorea y ajusta el impacto de los impuestos saludables en tu negocio y para realizar ajustes según sea necesario.

¿Cuál ha sido el impacto de estos impuestos en la promoción de la salud pública?

Los beneficios de los impuestos saludables se ven reflejados en distintos ámbitos del sector de la salud, y se espera que en el futuro se continúe evaluando y ajustando su implementación para maximizar el impacto positivo en la salud pública.

Desde el Ministerio de Salud, con lo recaudado, se han encargado del desarrollo de estrategias de alimentación saludable desde cuatro frentes: 

1. Atención primaria en salud, promoviendo y protegiendo la lactancia materna y la fortificación de alimentos.
2. Políticas regulatorias, como el etiquetado de advertencia y la regulación del contenido de sodio, azúcar y grasas saturadas de los productos.
3. Implementación de las Guías Alimentarias Basadas en Alimentos.
4. Gestión del conocimiento para promover el consumo de alimentos saludables.

En cuanto a los efectos en el consumo de productos catalogados como no saludables:

• Reducción del consumo de bebidas azucaradas: Estudios han demostrado una disminución de hasta el 12% en el consumo de gaseosas durante el primer año de la implementación del impuesto.
• Menor consumo de alimentos procesados: Se espera que el impuesto a los alimentos procesados tenga un efecto similar en la reducción del consumo de estos productos.

Análisis de casos exitosos alrededor de los impuestos saludables

Si bien se han implementado de manera reciente, en comparación con otros países de América Latina, se han observado algunos casos de éxito que evidencian su potencial para mejorar la salud pública, como los siguientes: 

1. Reducción del consumo de bebidas azucaradas: estudios realizados por el Instituto Nacional de Salud (INS) y la Universidad de Los Andes han demostrado una reducción del 12% en el consumo de bebidas azucaradas durante el primer año de implementación del impuesto.

Esto se asocia con un menor consumo de calorías y azúcares libres.

2. Financiamiento de programas de salud pública: Entre los programas financiados con estos recursos se encuentran campañas publicitarias para promover hábitos saludables, programas de educación nutricional en escuelas y comunidades, y el fortalecimiento de la atención primaria en salud.

Esto contribuye a mejorar el conocimiento, las actitudes y las prácticas de la población en materia de salud, lo que a su vez se traduce en una mejor salud individual y colectiva.

Es importante que los impuestos saludables sean parte de una estrategia integral de salud pública que incluya otras medidas como la promoción de la alimentación saludable, la actividad física y la educación nutricional.

¿Aprendiste sobre los impuestos saludables? 🤓 Si tienes dudas, cuenta con Cuenti😉

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